¿Por qué tener un seguro es una decisión inteligente y amorosa?

 

Tomar decisiones inteligentes no siempre se trata de números. A veces, también se trata de amor.
Amor por lo que hemos construido. Amor por quienes amamos. Amor por nuestra tranquilidad.
Tener un seguro, ya sea de salud, vida, vehículo, vivienda o incluso una patineta o bicicleta no es simplemente cubrir un “por si acaso”. Es una forma de pensar en el futuro con responsabilidad, estrategia… y mucho corazón.
Lo inteligente: proteger lo que cuesta esfuerzo conseguir
Usted trabaja, planifica, ahorra y construye. Un seguro le permite cuidar ese esfuerzo y estar preparado frente a situaciones inesperadas que podrían representar una pérdida económica importante.
Desde una enfermedad repentina hasta un accidente de tránsito o una calamidad en el hogar, el seguro actúa como una red de respaldo. Es, en términos simples, una herramienta que le ayuda a dormir tranquilo sabiendo que no está solo ante los imprevistos.

 

Tener un seguro no lo hace pesimista.

Lo hace previsor. Y eso, definitivamente, es inteligencia emocional y financiera.

Lo amoroso: cuidar a quienes más queremos.

Si usted tiene hijos, pareja, padres o incluso una mascota… sabe lo valioso que es protegerlos.

Un seguro de vida, por ejemplo, no se contrata pensando en uno mismo, sino en los que se quedan. Es una forma de decir “me importas” incluso cuando no estamos.

Los seguros también protegen a los demás: a esa persona que podría verse afectada si usted no puede trabajar, al ser querido que depende de su ingreso o al familiar que tendría que asumir gastos inesperados.
Por eso decimos que tener un seguro es un acto de amor.
Un mensaje silencioso que dice:

 

“Pienso en ti. Me importas. Quiero que estés bien.”

El seguro ideal es el que se adapta a su vida

No se trata de tener cualquier seguro. Se trata de tener el adecuado para su realidad, con coberturas claras, condiciones honestas y una compañía que realmente le acompañe en el momento en que más lo necesite.

Por eso, antes de contratar, es importante asesorarse, preguntar y entender para qué sirve cada póliza. El mejor seguro es el que usted comprende y el que le hace sentir respaldado.
En conclusión: tener un seguro es…

 

• Una decisión inteligente, porque protege su patrimonio.
• Una decisión estratégica, porque le permite anticiparse a los imprevistos.
• Y una decisión amorosa, porque cuida lo más importante: la tranquilidad de los suyos.
Hoy puede parecer un gasto. Mañana puede ser su mayor alivio.

¿Le gustaría que le ayudemos a encontrar el seguro ideal para usted?

En Te Aseguramos, estamos para acompañarlo con opciones pensadas para su vida.